San José, (elpais.cr) - A pesar de que el Índice de Confianza del Consumidor (ICC), encuesta periódica que realiza la Escuela de Estadística de la Universidad de Costa Rica (UCR), pasó en el ultimo trimestre de 34.8% a 37.5%, los académicos consideran que los consumidores costarricense muestran pesimismo e incertidumbre sobre la situación económica del país.
Explicaron que algunas de las razones que podrían estar provocando este sentimiento en el principal sostén económico de los hogares costarricenses son: el impacto de la crisis económica mundial y la contracción de algunas actividades económicas como la industria, la construcción y el turismo.
El coordinador de la encuesta, Johnny Madrigal Pana, del Centro de Estudios de Opinión de la Escuela de Estadística, destacó que la XXII consulta muestra que la confianza de los consumidores pudo aumentar en el último trimestre en tres puntos, debido a la reducción de los precios de la gasolina y de algunos alimentos.
Madrigal dijo que aunque es evidente que el pesimismo se mantiene en toda la población, pues el índice de confianza es bajo, el leve incremento registrado en la encuesta de mayo se dio tanto en hombres como en mujeres, de todas las edades y de todos los niveles educativos.
Además, hizo notar que el Índice de Condiciones Económicas Actuales disminuyó en cinco puntos en tres meses, sin embargo las expectativas económicas se incrementaron en ocho puntos.
Para Madrigal esto demuestra que la expectativa de los consumidores para el futuro es más positiva que la que demostraron hacia el momento actual.
El ICC se compone de dos índices el de Condiciones Económicas Actuales (ICEA) y el de Expectativas Económicas (IEE); el primero se deriva de las preguntas que valoran el momento para la compra de bienes duraderos como casa y carro y la percepción de la situación económica familiar comparada con un año atrás. El IEE se obtiene de las preguntas sobre la situación económica de la familia y de las empresas dentro de un año y de la situación del país en los próximos cinco años.
Futuro
Por primera vez desde que se realiza la encuesta para obtener el ICC, desde setiembre del 2002, la valoración de la situación económica del presente y del futuro marca una diferencia de 15 puntos.
Madrigal añadió que esto demuestra que actualmente la confianza está deteriorada, pero que la expectativa para el futuro es positiva porque “la gente lo percibe como el fin de la crisis”.
Además, dijo que la población no ha sentido que la recesión haya impactado tanto la economía de Cota Rica como lo ha hecho en otros países.
Con respecto al Plan Escudo propuesto por el gobierno para aliviar el impacto de la crisis económica, los encuestados lo consideran un tema polémico, porque ha habido muchas críticas al respecto en la prensa por parte de analistas políticos y económicos.
Es por esa razón que a pesar de las propuestas del gobierno, la percepción de los encuestados es desfavorable con respecto a la política económica y social, cayo 7 puntos de febrero a mayo. De tal manera que solo el 22,8% considera que el gobierno está haciendo un buen trabajo, y el 40,3% creen que está haciendo un trabajo pobre.
El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) es producto de la encuesta periódica que realiza la Escuela de Estadística de la Universidad de Costa Rica. De setiembre del 2002, fecha de la primera encuesta, hasta marzo del 2005, su frecuencia fue semestral (marzo y setiembre). A partir de agosto del 2005 se realiza trimestralmente (febrero, mayo, agosto y noviembre) con el apoyo de la Rectoría de la Universidad de Costa Rica.
La encuesta se realiza asumiendo que el optimismo hacia la economía genera confianza entre los consumidores y, como consecuencia, aumenta el deseo de realizar gastos y contraer deudas, y que, por el contrario, la incertidumbre produce pesimismo y, por ello, el deseo de reducir los gastos y reorganizar las reservas financieras.
Se prevé, entonces, que cuando muchos consumidores cambian al mismo tiempo de una perspectiva a otra, surge un cambio generalizado en su comportamiento de compra y esto afecta, de manera favorable o desfavorable, la economía nacional.
Debido a que el cambio en las actitudes y las expectativas de los consumidores ocurren previamente al suceso, se considera que el ICC puede actuar como un indicador adelantado de la actividad económica global. De esta manera, el planteamiento le asigna gran importancia al poder del consumidor.
En cuanto a la situación económica actual de la familia el mayor puntaje se registró en “Peor que hace un año” con 51%; sobre la percepción del futuro del país en los próximos cinco años: Son más las personas que creen que habrá periodo de crisis, pero este porcentaje, aunque el mayor, disminuyó respecto de febrero pasado, pues pasó de 55,7% a 45,2%. Mientras que quienes esperan buenos tiempos, el segundo puntaje más alto, aumentó de 25,7% a 36,1%.
En la consulta sobre tasas de interés e inflación para los próximos meses, los encuestados esperan cifras mayores que ahora, porcentaje que pasó de de 54% a 55%.
Sobre el trabajo del Gobierno la calificación “pobre” fue la más alta, que pasó de 35,6% a 40,3% y “trabaja lo necesario” la segunda, que pasó de 35% a 33,9%.
Por otro lado, en el tema del desempleo, las personas esperan un mayor desempleo, aunque esta cifra bajó de 71,7% a 62,4%., mientras que los encuestados también esperan una mayor pobreza, porcentaje que pasó de 78,6% a 73,2%.